¿Qué ocurre cuando las relaciones pasadas regresan a tu vida?
Corría el mes de abril, un domingo cualquiera sin más planes que las de tener un trío con el sofá de mi sala y mi control remoto acompañada de un gran tazón de palomitas de maíz. Mi pijama para nada sexy consistía en una camiseta de color amarillo con la imagen del emoji con sueño y un minúsculo pero acogedor short de color blanco, obsequios de la navidad pasada.
En fin…
Me acomodo en el sofá, pongo mi móvil en silencio y me preparo a disfrutar de una película cuando de pronto….
Suena el interfono…
- Presiono el botón y antes de pronunciar palabra alguna…
- Elena, abre la puerta… necesito hablar
Oh por dios!!! Carlos!!! Que hace aquí???
- Sé que tu novio no está, abre por favor
Mi cabeza se queda en blanco y por unos instantes mi capacidad de reaccionar me abandona!!!
- Elena, vamos… solo será por poco rato.
Intento entender que está pasando…
Sigo sin reaccionar….
Como un intento por volver a la realidad respondo apresuradamente:
- 15 minutos, nada más.
Mientras Carlos subía por las escaleras hasta el cuarto piso del edificio (agradecida de que el ascensor estuviera descompuesto), me daba tiempo para analizar lo que estaba haciendo.
Carlos y yo habíamos sido amantes por muchos años, para ser exactos 5… pero nuestra relación empezó a deteriorarse y al parecer a ninguno de los 2 le interesaba rescatarla… un día y tras varios intentos por superar nuestra mala racha, decidí dejarlo…
Hacia 2 años desde aquel día…
La verdad, desde que Eduardo llegó a mi vida, todos los recuerdos que tenia de Carlos se desvanecieron poco a poco…
Hasta ahora…
Abro la puerta para cerciorarme que ningún vecino me tome por sorpresa.
De pronto, volteo a mi derecha y lo alcanzo a ver.
Hombre de 32 años 1.70m, trigueño, de cabello castaño y ojos color miel… había olvidado lo guapo que era…
Cuando las relaciones pasadas regresan a tu vida
*Me sonríe…
Lo invito a pasar y antes de terminar de cerrar la puerta, se abalanza sobre mí y me besa… trato de quitármelo de encima, pero mis fallidos intentos solo lo hacen desearme más… Renuncio…. Y caigo ciegamente en sus labios… no hay palabras, solo besos apasionados. Intento apartarlo, pero no consigo nada, vuelvo a fracasar otra vez… Ahora me quita la blusa y yo no pongo resistencia alguna, lo ayudo a quitarse su camisa… Mis ojos recorren lentamente su cuerpo, nada había cambiado…
Termina por quitarme mis shorts y cuidadosamente me coloca en mi cama, sus labios empiezan a recorrer todo mi cuerpo hasta llegar a mi vientre… Hace una pausa… Me mira fijamente como si quisiera mi permiso para continuar… Pero yo no pronuncio palabra alguna y sólo lo dejo seguir. Me desconozco totalmente, pero me niego a parar lo que desde un principio sabía que sucedería…
Y sin más actos ceremoniales me hizo suya por 3 ocasiones…
Lo hicimos en el cuarto, en la sala y en el comedor… Parecíamos aquellos adolescentes que recién descubrían el sexo… había olvidado lo bien que me sentía cuando estaba con él.
Pero también recordé porqué lo nuestro terminó, y me sentí triste, porque sabía que ya era demasiado tarde para nosotros…
Al parecer Carlos también lo había recordado… Y ya con cabeza fría solo alcanzó a decir Te amo.
Sé levantó y se vistió, caminó hacia la puerta y antes de salir me dijo una última cosa:
Es un gran chico Elena, díselo. Dile que te cuide o sabrá de mí muy pronto.
Sonrió y salió así como entró a mi casa, en un instante.
Sin besos, sin lágrimas, sin un adiós…
Meses después me casé con Eduardo, nos mudamos de ciudad formé un hogar y nunca más volví a saber de Carlos…
¿Qué ocurre cuando las relaciones pasadas regresan a tu vida? Ha sido escrito por Alma Maquiavelo, escritora y tuitera
